miércoles, 12 de marzo de 2014

Titularidad de la Mezquita-Catedral -Texto completo-




Desde la Asociación “Europa Laica”  se propugna la laicidad entendida como el establecimiento de las condiciones para la libertad de conciencia.
Defendemos que el Estado debe ser garante de que los ciudadanos puedan ejercer su libertad de conciencia pero de una manera neutral sin otorgar privilegios a una confesión especifica y con una separación clara entre lo público y lo privado, entendiendo que las creencias de los ciudadanos deben estar en el terreno de lo privado.

Arthur Schopenhauer:
"Toda verdad pasa por tres fases.
Primero se la ridiculiza.
Segundo, genera una violenta oposición.
Tercero, resulta aceptada como si fuera algo evidente".

“Todos sabemos desde siempre que la tierra es redonda y que gira alrededor del sol”, ¿o no?

La “verdad” que vengo a exponer en nombre de Córdoba Laica es que la titularidad de la Mezquita-Catedral corresponde a la ciudadanía de Córdoba, considerado Bien de Interés Cultural, Monumento Nacional y Patrimonio de la Humanidad, por lo que cualquier acto de apropiación privada, y la Iglesia Católica lo es, carece de valor jurídico al tratarse de un bien público.

Desde Córdoba Laica  planteamos que existen dudas razonables sobre la “legitimidad” de la Iglesia católica para autoproclamarse dueña de la M-C, al entender que la legislación hipotecaria en materia de inmatriculación de bienes inmuebles eclesiásticos utilizada por dicho organismo va en contra de los principios constitucionales de igualdad ante la ley (Art. 14) y de aconfesionalidad del Estado, al atentar contra el articulo 16.3 de la Constitución Española que establece que “ninguna confesión tendrá carácter estatal”.
Con esta normativa se ha tratado de equiparar a la iglesia católica como “Entidad de Derecho Público” y a los obispos diocesanos con funcionarios públicos, pudiendo ser considerada, esta legislación hipotecaria, como un procedimiento anacrónico resquicio de un modelo de relaciones Iglesia-Estado de corte confesional que fue superado por la entrada en vigor de la Constitución Española de 1978.
Actualmente no cabe asimilar los fines religiosos con los públicos, ni a los miembros de una Confesión religiosa, por muy cualificada que sea su posición dentro de la misma, con los funcionarios públicos.

Como ejemplo de la etapa de ridiculización, a la que hacía referencia la cita de Schopenhauer el Sr. Nieto Cumplido, CANONIGO ARCHIVERO DE LA CATEDRAL, sobre la propiedad de la Mezquita declara: "No hay que justificar lo evidente"
Tan evidente como que la tierra está quieta y es el sol el que gira alrededor de ella. Evidencia que estuvo a punto de costarle la vida a Galileo porque lo que él observaba era lo contrario.

Además, insta a la Junta a "no hacer el ridículo, porque en la UE se lleva poco un asalto a la propiedad privada".

Totalmente de acuerdo con este Sr. pues es evidente que lo que se lleva en la Unión Europea al igual que en nuestro país es “el asalto a lo público” en beneficio de algunos privilegiados, entre los que, como todos sabemos en nuestro país, se encuentran los bancos y la Iglesia Católica.

Añade este Sr. que uno de los campos actuantes en esta disputa es "la confrontación entre profesionales del Derecho, y apostilla --unos bastante más competentes que otros--,
Supongo que los más competentes son los que de acuerdo con la Iglesia defienden la obviedad acerca de su propiedad sobre la M-C  y seguramente se basará en los Hechos, pero los “Hechos de los Apóstoles” porque en cuanto a los “Hechos históricos” los eruditos eclesiásticos suelen ir de metedura de pata en metedura de pata y varios pasos por detrás de los conocimientos científicos.                                                                                                         Afirma que -"en parte" se quiere llevar el templo a Sevilla y alerta de "pretensiones del mundo árabe"-.  Sin comentarios.

Por otro lado resulta paradójico que José Antonio Nieto, Alcalde de Córdoba, asuma la defensa de los privilegios del cabildo catedralicio por encima del interés común de la ciudadanía a la que representa. 

                                                                                                                                Quiero recordarle Sr. Alcalde que:                                                                            “El indicador por antonomasia del buen hacer de un gobierno, y por extensión de un buen gobernante, es cómo atiende los intereses de su pueblo, en especial de los más débiles, y si es capaz de protegerlo especialmente durante los tiempos difíciles y frente a los poderosos.” 

No es de recibo que en este debate en el que se plantea por una parte que el monumento de la M-C debe pertenecer a la TOTALIDAD de los cordobeses de los que el Alcalde es su representante, frente a otra que defiende la propiedad para una organización privada, de ámbito internacional y dependiente de un jefe de estado extranjero como es la Iglesia Católica, el Alcalde de Córdoba se ponga de parte de quienes quieren apropiarse del bien en beneficio privado frente a los que defendemos lo público.
No parece que el Sr. Alcalde esté defendiendo los intereses de los cordobeses ante el riesgo de perder el más importante y emblemático monumento de la ciudad.
Entendemos el conflicto de intereses que se le puede plantear, al tener que decidir entre cumplir con su obligación de Alcalde y defender en consecuencia el patrimonio  de los ciudadanos cordobeses frente a una organización privada a la que en función de sus creencias pertenece.
Es evidente que nos encontramos ante un hecho histórico, dada la trascendencia que tendrá, independientemente del resultado final, por lo que Ud. Sr. Nieto podrá ser recordado como el Alcalde que defendió jurídica, política y socialmente la pertenencia de la Mezquita-Catedral al pueblo de Córdoba o por el contrario quien dio la espalda a su pueblo para posicionarse del lado de la poderosa iglesia católica.
En Córdoba tenemos el caso de un Alcalde, el Sr. Anguita, que en 1980 con el apoyo de los ciudadanos, las leyes y la negociación con sus propietarios, evitó el expolio al extranjero de los tesoros de otro monumento emblemático de nuestra ciudad, como es el Palacio de Viana.
Desde Córdoba Laica denunciamos la ilegitimidad y presunta inconstitucionalidad de esta absurda situación como consecuencia de la aplicación de los artículos 206 de la Ley Hipotecaria y 304 de su Reglamento por parte de la iglesia católica y exigimos responsabilidades a los poderes públicos que lo están permitiendo, requiriendo a los grupos políticos con representación parlamentaria que modifiquen con carácter retroactivo la citada ley y su reglamento, adaptándola a la situación democrática y constitucional del momento.
Por otra parte hacemos un llamamiento a los ciudadanos cordobeses para que se movilicen en defensa de sus intereses, reclamando la devolución de la Mezquita-Catedral al Estado Español (no a ninguna secta, religión u organismo extranjero) quien mediante una Fundación o Patronato Público, del que formarían parte el Ayuntamiento de Córdoba, los Gobiernos Regional y Central, la Universidad y, en su caso, entidades privadas de carácter cultural o de investigación, en la que se garantice la transparencia en todos los aspectos de su gestión, incluida la económica, y cuyos beneficios, si los hubiere, reviertan en Córdoba y los cordobeses.

Antonio Pintor Álvarez
Córdoba Laica 11 de Marzo 2014

martes, 11 de marzo de 2014

Titularidad de la Mezquita-Catedral

Intervención realizada en nombre de Córdoba Laica en el pleno del Ayuntamiento de Córdoba el martes 14 de Marzo del 2014











Arthur Schopenhauer:
"Toda verdad pasa por tres fases.
Primero se la ridiculiza.
Segundo, genera una violenta oposición.
Tercero, resulta aceptada como si fuera algo evidente".

“Todos sabemos desde siempre que la tierra es redonda y que gira alrededor del sol”, ¿o no?

La “verdad” que vengo a exponer en nombre de Córdoba Laica es que la titularidad de la Mezquita-Catedral corresponde a la ciudadanía de Córdoba.
Desde Córdoba Laica  planteamos que existen dudas razonables sobre la “legitimidad” de la Iglesia católica para autoproclamarse dueña de la M-C, al entender que la legislación hipotecaria en materia de inmatriculación de bienes inmuebles eclesiásticos utilizada por dicho organismo va en contra de los principios constitucionales de igualdad ante la ley (Art. 14) y de la aconfesionalidad del Estado (Art. 16.3) que establece que “ninguna confesión tendrá carácter estatal”.
Se ha tratado de equiparar a la iglesia católica como “Entidad de Derecho Público” y a los obispos diocesanos con funcionarios públicos, pudiendo ser considerada, esta legislación hipotecaria, como un procedimiento anacrónico, resquicio de un modelo de relaciones Iglesia-Estado de corte confesional que fue superado por la entrada en vigor de la Constitución Española de 1978.
Actualmente no cabe asimilar los fines religiosos con los públicos, ni a los miembros de una Confesión religiosa, por muy cualificada que sea su posición dentro de la misma, con los funcionarios públicos.

El CANONIGO ARCHIVERO DE LA CATEDRAL, al referirse a la propiedad de la Mezquita declara: "No hay que justificar lo evidente"
Tan evidente como que la tierra estaba quieta y era el sol el que giraba alrededor de ella.
Además, insta a la Junta a "no hacer el ridículo, porque en la UE se lleva poco un asalto a la propiedad privada".
Totalmente de acuerdo con este Sr. pues es evidente que lo que se lleva en la Unión Europea al igual que en nuestro país es “el asalto a lo público” en beneficio de algunos privilegiados, entre los que, como todos sabemos en nuestro país, se encuentran los bancos y la Iglesia Católica.

Por otro lado resulta paradójico que José Antonio Nieto, Alcalde de Córdoba, asuma la defensa de los privilegios del cabildo catedralicio por encima del interés común de la ciudadanía a la que representa.

Quiero recordarle al Sr. Alcalde que:

El indicador por antonomasia del buen hacer de un gobierno, y por extensión de un buen gobernante, es cómo atiende los intereses de su pueblo, en especial de los más débiles, y si es capazde protegerlo sobre todo durante los tiempos dificiles y frente a los poderosos.                                                  

Evidentemente nos encontramos ante un hecho histórico, dada la trascendencia que tendrá, independientemente del resultado final, por lo que el Sr. Alcalde podrá ser recordado como aquel que defendió jurídica, política y socialmente la pertenencia de la Mezquita-Catedral al pueblo de Córdoba o por el contrario quien dio la espalda a su pueblo para posicionarse del lado de la poderosa iglesia católica, cuya jerarquía, no olvidemos, obedece y depende de un jefe de estado extranjero.
En Córdoba tenemos el caso de un Alcalde, el Sr. Anguita, que en 1980 con el apoyo de los ciudadanos, las leyes y la negociación con sus propietarios, evitó el expolio al extranjero de los tesoros de otro monumento emblemático de nuestra ciudad, como es el Palacio de Viana.

Desde Europa Laica denunciamos la ilegitimidad y presunta inconstitucionalidad de esta absurda situación y exigimos responsabilidades a los poderes públicos que lo están permitiendo, requiriendo a los grupos políticos con representación parlamentaria que modifiquen con carácter retroactivo el articulo 206 de la Ley Hipotecaria  y el 304 de su Reglamento, adaptándola a la situación democrática y constitucional del momento.

Por otra parte hacemos un llamamiento a los ciudadanos cordobeses para que se movilicen en defensa de sus intereses, reclamando la devolución de la Mezquita-Catedral al Estado Español (no a ninguna secta, religión u organismo extranjero) quien mediante una Fundación o Patronato Público, del que formarían parte el Ayuntamiento de Córdoba, los Gobiernos
Regional y Central, la Universidad y, en su caso, entidades privadas de carácter cultural o de investigación, y en la que se garantice la transparencia en todos los aspectos de su gestión, incluida la económica, y cuyos beneficios, si los hubiere, reviertan en Córdoba y los cordobeses.

Antonio Pintor Álvarez
Córdoba Laica 11 de Marzo 2014